PADRES HABRÍAN SIDO AMENAZADOS. POLICÍA PROMETIÓ DAR CON LOS RESPONSABLES DEL CRIMEN.
Este sábado se realizaron las honras fúnebres de los cuatro menores asesinados en Caquetá. Cientos de personas asistieron a la eucaristía que se realizó en la Catedral Nuestra Señora de Lourdes con la presencia de autoridades locales.
"Es un crimen que de ninguna manera se puede aceptar", dijo este sábado el presidente Juan Manuel Santos al reiterar su repudio por la matanza, durante un acto con jóvenes beneficiarios de becas.
El mandatario recordó que le pidió al comandante de la Policía Nacional, general Rodolfo Palomino, que viajará a Florencia y no regresara "hasta que no resuelvan este crimen abominable".
"Justicia", gritaron los asistentes al sepelio, mientras imágenes emitidas por medios locales mostraban a la multitud que acompañó a la familia de los cuatro menores llevando globos blancos en señal de paz.
Por su parte, el general Palomino dijo: "Necesitamos que solidaridad en Caquetá se traduzca en información. Daremos con los responsables de tan atroz crimen".
En los últimos días se conoció que una amenaza que le habrían hecho al padre de los cuatro menores masacrados en la zona rural de Florencia para que dejaran su rancho es una de las hipótesis que estudian las autoridades sobre las razones que habrían motivado el crimen que tiene conmocionado al país, según aseguró el secretario de Gobierno y Gobernador (e) del Caquetá, Hugo Rincón.
Según el alto funcionario del departamento, el padre de los menores habría sido hostigado para que saliera de su rancho, ubicado a 100 metros de la vía que conduce hacia el Huila, donde se había establecido con su familia y tenía algunos cultivos de pancoger.
Rincón también subrayó que si bien este es uno de los indicios que revisan las autoridades regionales, el caso aún está en etapa de investigación y "no se puede descartar ninguna posibilidad". Aclaró, también, que no hay indicios de que la autoría de la masacre sea de un grupo armado.
Hasta ahora, según narró Rincón, se presume que los autores del crimen habrían sido dos hombres que llegaron hasta el rancho preguntándoles a los niños por su padre.
"Los hicieron acostar y les dieron un tiro de gracia. Uno de los niños se hizo el muerto y, cuando se fueron, él salió corriendo, caminó 500 metros hasta la casa de una conocida y dio aviso de lo que les había pasado a los hermanitos", dijo el funcionario.
El menor herido, de 12 años, recibe atención médica en el hospital María Inmaculada de Florencia. Las víctimas tenían 4, 10, 14 y 17 años.
El Defensor del Pueblo seccional, Álvaro Castelblanco, ratificó que hay versiones de que se trataría de un problema de tierras, pero él las desestimó.
"Yo no creo que ese sea el objetivo; puede que haya sido el florero para la disputa, pero mandar a asesinar, o que se vaya y se les asesine de esa manera y más tratándose de seres indefensos, eso ya no es ningún tipo de delincuencia sino un grado de locura de alta peligrosidad para la comunidad", aseguró.
Castelblanco también descartó que se tratara de un grupo armado. "Yo no creo que la guerrilla en estos momentos vaya a hacer una cosa de esas", dijo.
El secretario de Gobierno les solicitó a la Policía, el Ejército y la Fiscalía la creación de un grupo especial para esclarecer el crimen. "No hay ninguna razón para que un ser humano le quite la vida a otro. Menos para que cuatro menores sean asesinados de esta manera. La Administración departamental repudia este crimen. Estamos mirando como podemos ayudar a los papás", concluyó.
Por otro lado, el presidente Juan Manuel Santos le ordenó a la Policía capturar a los responsables. Además, las autoridades ofrecieron una recompensa de 50 millones de pesos a quien dé información que permita capturarlos.
