Desempeño profesional es el principal reto y la principal preocupación de las colombianas.
Así lo revela el 'Sensor Yanbal de la Mujer Colombiana', que también muestra que de las 819 encuestadas, tan sólo el 5 por ciento se dedicaría al hogar.
El estudio fue contratado por esta firma a Millward Brown, que entre el 21 y el 29 de enero pasados entrevistó a mujeres, de 18 a 60 años, de los estratos 1 al 6, de Bogotá, Medellín, Cali y Barranquilla.Las colombianas son una mezcla entre la tradicional mujer latina -que no olvida el hogar y los hijos- y la mujer maravilla: aquella que quiere que las 24 horas del día le alcancen para trabajar tiempo completo, hacer una maestría, mantener limpia la casa, tener hijos, criarlos y, de paso, estar en forma y bonita.Están convencidas de que trabajar es la actividad ideal de sus vidas, que cumplen jornadas laborales de 48 horas a la semana, igual que los hombres; que duplicaron su participación en el mundo laboral en los últimos 30 años -pasando del 30 al 60 por ciento-; que son más educadas que ellos y que anhelan ser empresarias para obtener los beneficios de ser sus propios jefas.El estudio, que busca profundizar en la mentalidad y valores de la mujer como actor social y económico en el país, fue presentado por Yanbal a ESTE MEDIO INFORMATIVO con ocasión del Día de la Mujer que se celebra hoy en todo el mundo.De acuerdo con sus hallazgos, para el 58 por ciento de las colombianas el papel ideal de la mujer consta de tres roles: estudiar, trabajar y dedicarse al hogar. "Son una especie de super mujeres que están en pleno proceso de transformación y que necesitan de un cambio en la sociedad para no reventarse", dice Ximena Peña, docente e investigadora de la Universidad de Los Andes.Satisfechas, pero invisiblesTambién son mujeres más satisfechas con su papel actual en la sociedad: 61 por ciento dice sentirse valorada y 68 por ciento afirma que tiene las mismas oportunidades que los hombres. Su opinión, en cambio, está dividida en el tema de la igualdad salarial con los hombres, pues 48 por ciento se siente mal remunerada por ser mujer. La brecha es más grande en Bogotá (54 por ciento) y entre las más pobres y más ricas.Su capacidad laboral vuelve a destacarse al preguntarles por las características que más las identifican: trabajadora, 78 por ciento; emprendedora, 63 por ciento, e inteligente, 45 por ciento, son las más mencionadas.Y no están equivocadas. Según el Estudio Nacional de Hogares la mujer es hoy gran generadora de ingresos y su trabajo representa más del 40 por ciento de los ingresos reportados por las familias colombianas.Sin embargo, su aporte parece ser invisible incluso para ellas. Al interrogarlas sobre las áreas en las que creen que la mujer es un agente de desarrollo o mejoramiento para el país, la labor educativa, con el 37 por ciento, fue la más mencionada; seguida de la económica, con el 32 por ciento, y la social, con el 26 por ciento.Incluso entre las que mencionaron su aporte económico como el más destacado, el 89 por ciento dice que su valor está en ser "buenas administradoras" y "hacer rendir la plata" en casa."Nos llama poderosamente la atención que para las mujeres sea invisible el hecho de que ellas aportan buena parte de los ingresos del hogar. Eso es muy curioso", dice Peña.
Ser su propia jefeAsí mismo, es claro el deseo de las colombianas por hacer empresa, aunque el 87 por ciento de las que expresaron querer hacerlo contrasta con el 30 por ciento que efectivamente lo hace. Sorprende, eso sí, que el 67 por ciento de las encuestadas no conozca el nombre de ninguna empresaria exitosa y reconocida y que sus principales referentes sean Silvia Tcherassi (28 por ciento), Paula Andrea Betancur (11 por ciento), Carolina Cruz (10 por ciento) y Noemí Sanín (8 por ciento)."No es raro que la mayoría prefiera ser empresaria independiente que empleada ya que esa parece ser la única forma de tener flexibilidad para cumplir los múltiples roles que se autoasigna", analiza Isabel Londoño, de la Fundación Mujeres por Colombia.Tampoco es extraño, dicen las expertas, que el 45 por ciento quiera trabajar medio tiempo, especialmente aquellas que tienen hijos y están en los niveles socioeconómicos más bajos.El Sensor también pone en duda algunos estereotipos femeninos. Por ejemplo, que belleza y palancas son clave a la hora de buscar trabajo, pues según las colombianas educación, con 32 por ciento; experiencia, con 19 por ciento, y contactos y relaciones (networking), con 16 por ciento, son los requisitos más importantes.Igualmente, se equivoca quien crea que hijos y hogar son las preocupaciones más grandes de las mujeres. Problemas económicos, con 51 por ciento, y laborales, con 50 por ciento, son los temas más angustiantes para ellas; mientas que el hogar y los hijos marcaron 41 y 38 por ciento, respectivamente. Su salud, entre tanto, solo les preocupa en un 19 por ciento y su apariencia física apenas llega al 8 por ciento.El estudio de Yanbal fue entregado a las dos expertas de la Universidad de Los Andes, con el fin de que ellas hicieran recomendaciones.Entre las más importantes están promover la flexibilización horaria del mercado laboral, así como los empleos de medio tiempo. También, facilitar el acceso de las mujeres al mundo empresarial.Así mismo, visibilizar la participación de la mujer en la generación de ingresos y en la creación de nuevas empresas y resaltar modelos de mujeres empresarias en todos los campos.También, establecer políticas de cuidado infantil para aquellas mujeres de clase media que no pueden pagar por el cuidado privado de sus hijos, ni estos tienen cabida en hogares comunitarios.No hay que olvidar que tras este nuevo papel de las mujeres colombianas, como fuerza laboral activa, en crecimiento y con pocas ganas de volver al hogar, quedan hijos que hace unas décadas crecían al cuidado de sus madres y que ahora solo las ven después de las 7 p.m., cuando termina la jornada laboral.
