El pasado 18 de abril un jurado de Miami, con una votación de nueve a favor y tres en contra, había sugerido la condena máxima para Víctor Caraballo, de 39 años y de origen puertorriqueño.
El juez William Thomas anunció que, pese a los "factores atenuantes" presentes en el caso, condenaba a Caraballo a la pena de muerte por el asesinato en primer grado de Ana María Ángel.
Sobre Caraballo y otros cuatro sospechosos pesaban los cargos de asesinato en primer grado, intento de asesinato, agresión sexual con un arma, secuestro armado y robo.
Todos ellos fueron acusados de violar y asesinar a Ana María Ángel, de 18 años, después de secuestrarla en Miami Beach, donde se encontraba con su novio, el nicaragüense Nelson Portobanco, también de 18 años de edad.
Portobanco relató en el juicio que escuchó cómo violaban repetidamente a su novia, mientras lo mantenían a él sentado en el suelo de la camioneta en la que los secuestraron.
Después de ser acuchillado doce veces, los agresores dieron por muerto a Portobanco y lo abandonaron en una autopista cercana a Miami.
La policía dijo en el juicio que los acusados condujeron a Ana María Ángel en la camioneta hacia el norte de la ciudad, donde fue asesinada y su cuerpo arrojado ceca de la carretera interestatal I-95, en el condado de Palm Beach.
El abogado de Caraballo argumentó que su defendido no había apretado el gatillo de la pistola y que, por consiguiente, debía recibir una sentencia de cadena perpetua en vez de la pena máxima.
Carballo y los otros cuatro hombres acusados de la violación
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