viernes, 9 de agosto de 2013

Grafitero colombiano asesinado en Maimi “Lo que hicieron con Israel fue una masacre”

El padre del joven colombiano de 18 años que perdió la vida después de ser inmovilizado con un “taser”, exige respuestas

MIAMI.- Israel Hernández, padre del joven que murió en Miami Beach el martes tras ser inmovilizado con un “taser” por agentes de la Policía, y quién se llama igual que su hijo de 18 años, calificó el hecho como una “masacre, una barbarie” y consideró que los agentes dispararon “como si se hubiera tratado de un perro”.

Israel Hernández Llach fue sorprendido cuando pintaba grafitis hace tres días en un edificio abandonado. Según la Policía de Miami Beach, el adolescente trató de escapar corriendo, pero al final fue acorralado e inmovilizado con una pistola “taser”, un tipo de dispositivo con descarga eléctrica para detener a un sospechoso.

Una hora después, de acuerdo al reporte policial, falleció en el Hospital Mount Sinai, donde había sido trasladado.

“Nosotros queremos movilizarnos para crear una fundación, cuyo objetivo sea luchar contra el uso de este tipo de dispositivos y también para que los operativos policiales sean más tolerantes”, agregó Hernández.

Israel Hernández Llach era el menor de los cuatro hermanos, un joven talentoso, le gustaba pintar, hacía grafitis y practicaba mucho deporte. No tenía antecedentes delictivos, no sufría enfermedades ni consumía drogas.

Su padre relató que al momento en que los agentes policiales llegaron a su domicilio, él estaba ausente, pero cuando llegó, lo primero que le preguntaron, después de explicarle que el adolescente estaba haciendo algo ilegal, fue la edad. “Es que mi hijo parecía tener menos y enseguida pregunté: ‘¿Tenía un arma?’ Y ellos respondieron: ‘No’. ‘¿Por qué entonces le dispararon?’ Entonces no contestaron ni una sola más de mis preguntas”, agregó Hernández 

¿Qué Sucedió?

Israel Hernández, Thiago Souza y Félix Hernández eran tres amigos que estaban como de costumbre patinando por las calles de Miami Beach. Al llegar a la esquina de la Avenida Collins y la calle 71 se detuvieron justo frente a un local comercial abandonado, “hace por lo menos un año y medio que está vacío”, según cálculos de Souza.

Allí, Israel sacó la pintura y comenzó a crear un grafiti, era su arte, su manera de expresarse. Según Souza, la Policía no dio la voz de alto y tampoco encendió las luces. “Cuando llegó la Policía, el trató de huir, trató de esconderse, pero luego quedó cercado y después lo vi tendido en el piso. En ese momento ya habían como veinticinco policías”.

“Al terminar esto, probablemente van a limpiar este edificio, el lugar va a volver a abrir, va a hacer otro negocio, la vida sigue, pero él está muerto. No me importa lo que dice la gente, que es un delito, la vida de él era más importante”, comentó Souza con la voz quebrada.

“Dicen que una ‘taser’ no es un arma letal, pero sí lo es, esto lo comprueba. Que yo sepa lo único que Israel tuvo una vez fue una hernia, era un chico muy sano. La Policía está presionándonos a mí y a mi amigo que digamos que todos estábamos bajo el efecto de una droga. Nosotros le hemos dicho que no y sin embargo ellos siguen insistiendo, están tratando de usar esto como un arma contra nosotros”, explicó.

Félix Hernández, también testigo presencial de la tragedia, declaró que “cuando la policía llegó, Israel se impulsó en la patineta, de pronto le falló, se dio vuelta, pudo volver a montarla y se despareció por cinco minutos en un edificio de aquí a la vuelta –declaró a DIARIO LAS AMÉRICAS, justo en el lugar de los acontecimientos-. Los policías prendieron las sirenas indicando que lo habían encontrado. Me acerqué y vi a cinco o cuatro policías empujarlo contra una pared y después ellos lo cubrieron y no pude ver más nada. Le comenté a mi otro amigo: ‘No puedo creer lo que estoy viendo’ y el me respondió: ‘Parece que está en el piso y no está respondiendo’”.

Félix relató que cuando pudieron acercarse a uno de ellos, les dijeron: “Tu amigo está muerto”, y se reían de cómo le habían dado con el “taser” y celebraban como habían logrado inmovilizarlo en el piso.

A otros jóvenes les envió un mensaje: “No hagan nada malo, porque la Policía aquí es una pandilla legal, cuando matan a alguien se convierte en un secreto para ellos, le mienten a todos”.

Enzo Juárez es otro amigo de la víctima y aunque no estuvo presente cuando todo sucedió, viajó el jueves desde Hollywood hasta la esquina del local comercial donde aún se ven algunos trazos del grafiti y unas notas escritas por amigos a puño y letra en homenaje a Israel.

Juárez recordó cómo hace apenas una semana celebraba su cumpleaños con su novia Michelle Diez y su excompañero de sexto grado, Israel Hernández. Michelle no pudo contener sus lágrimas, Enzo aseguró que ya está en campaña para recoger fondos y poder ayudar a pagar el funeral de su entrañable amigo, a quien conoció en el 2007.

Una investigación

Según la agencia AP, la autopsia practicada al joven no arrojó la causa de la muerte. El médico forense adelantó que practicarán otro tipo de exámenes. 

Familiares de la víctima quieren respuestas y pidieron una investigación independiente del caso.

El jefe de la Policía de Miami Beach, Ray Martínez, aseguró que el joven se le abalanzó sobre los agentes, uno de los cuales le disparó con el arma. 

“Taser”

Es un dispositivo de descarga eléctrica no letal que se utiliza para repeler a un atacante.

- Quiénes pueden portarlo

*En Florida está expresamente permitido su uso a cualquier persona mayor de 18 años y a los agentes policiales para someter a los delincuentes. 

*Cualquier individuo puede llevarla consigo, siempre que la mantenga oculta . Puede ser descubierta sólo en caso de necesidad y objetivos de autodefensa.

*Existe una disposición que permite a menores de 16 años portar un “taser”, siempre y cuando hayan sido autorizados por sus padres.

Puede ser usado a 15 pies de distancia, con la misma efectividad sin entrar en contacto con el sospechoso.

- Quiénes no pueden usarlo

*Una persona condenada por algún delito. 

*Un menor de edad. 

*Si un menor comete un delito grave, la prohibición se mantiene hasta que cumpla 24 años. 

*Si un padre es atrapado por permitir el uso de un “taser” a su hijo menor de edad, puede ser acusado de delito en segundo grado.

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