El Contralor General de la República, Julio César Turbay Quintero, llamó la atención sobre los problemas de cobertura de acueducto y alcantarillado que sigue presentado Colombia, a pesar de los esfuerzos que se han realizado en esta materia y señaló como ejemplo el caso de los municipios de Anapoima y La Mesa (Cundinamarca), afectados por racionamientos en el suministro de agua a la población, daños frecuentes en una redes de acueducto muy antiguas y deficientes servicios de alcantarillado.
A esta problemática se suma el pago inoportuno o no pago del servicio por parte de los usuarios, en ambas poblaciones. Una de las dificultades de la gestión en la prestación del servicio en el sector se deriva del pago inoportuno o no pago del servicio por parte de los usuarios, debido a la ausencia histórica de una cultura del pago.
Para el mes de abril de 2009, la cartera morosa del Municipio de La Mesa por concepto de facturación de los servicios públicos de acueducto, alcantarillado y aseo, ascendía a $596 millones de la cual el 87,8% supera 360 días de retraso. En similares condiciones, a junio de 2009 el Municipio de Anapoima presenta una cartera morosa de $633 millones (deuda que se ha duplicado entre 2006 a 2009).
Las cifras no han cambiado mucho
Según el Contralor, las coberturas en el sistema de acueducto y alcantarillado en el país continúan siendo deficientes y de baja calidad.
'De acuerdo con el censo del DANE para el año 2005 la cobertura en acueducto a nivel nacional llegaba al 83% de las viviendas y en alcantarillado al 73%, cifras que no han cambiado sustancialmente desde entonces, a pesar de ser obligatoria para el Estado la provisión universal de este servicio', señaló Turbay Quintero.
Citó también información de la Defensoría del Pueblo, para el mismo año, según la cual el servicio de acueducto cubre el 65,1% de las viviendas a nivel nacional, mientras el 41,2% tienen sistemas de alcantarillado. 'Aunque se han dado sistemas de cambio en la política del sector, algunos de ellos no han tenido el efecto esperado', comentó al respecto.
El Contralor General de la República instaló en Anapoima una Agenda Ciudadana sobre Agua Potable y Alcantarillado en esta población y en el municipio de La Mesa, donde se refirió a la situación de Cundinamarca, departamento en el cual, en muchas poblaciones, la demanda local no es abastecida por la oferta local, pues se registra uno de los mayores índices de escasez de agua en el país (13,6%).
Problemas de escasez y de calidad
En cuanto a la situación particular de los municipios de Anapoima y La Mesa, indicó Turbay Quintero, ambos municipios afrontan problemas de escasez por la no disponibilidad de fuentes de abastecimiento suficientes para atender la población y se presentan falencias de tipo geológico o hidráulico en las conducciones, situaciones que generan racionamiento para la población a la que se le presta el servicio, entre dos y tres días a la semana, con mayor restricción en el sector rural.
El alcantarillado urbano de estos dos municipios presta un servicio mixto, es decir, se mezclan las aguas lluvias con las residuales, hecho que en épocas de invierno genera el rebose de las alcantarillas. En estas condiciones los sistemas necesitan ser optimizados mediante un programa de reposición de redes y la construcción de vertederos estratégicos para la separación de las aguas lluvias y las negras, por lo que el Contralor Turbay Quintero consideró conveniente crear un espacio de tratamiento eficiente de las aguas residuales como parte del plan de saneamiento del río Bogotá. El jefe del ente de control expresó también preocupación por la calidad del agua que se presenta tanto en Anapoima como en La Mesa, dado que, de acuerdo con información de la Contraloría Departamental, en el primer caso se advierten valores preocupantes en cuanto a la turbiedad y en el segundo se observa presencia de nitros y aluminio residual.
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