miércoles, 23 de diciembre de 2009

GOBERNADOR DEL CAQUETA FUE DEGOLLADO POR SUS CAPTORES


Florencia 23. diciembre 2009

A pocos kilómetros de su vivienda, donde fue secuestrado, las autoridades encontraron el cadáver del gobernador del Caquetá, Luis Francisco Cuéllar, quien no resistió el quinto secuestro.
Horas después de haber sido secuestrado, en una planeada operación guerrillera, las autoridades localizaron el cuerpo sin vida del gobernador del Caquetá, Luis Francisco Cuéllar Carvajal. El mandatario caqueteño llevaba botas pantaneras, una camiseta roja y estaba en interiores.
El cadáver fue localizado hacia las 4:00 p.m. en la vereda ‘El Salado’ en el corregimiento de San Antonio de Atenas, por un campesino del lugar, quien reportó su localización exacta.
Un campesino de la zona descubrió el cuerpo, en un cañón boscoso y puso en alerta a las autoridades que lo rescataron hacia las 4:30 de la tarde en la vía hacia la región de Alto Brasilia, donde horas antes incineraron la camioneta que utilizaron para trasportarlo.
Tres helicópteros Blak Hawk llegaron al lugar y en pocos minutos rescataron el cadáver y lo trasladaron hasta Florencia donde fue plenamente identificado.
Al parecer, el comando subversivo había preparado con anticipación los puentes peatonales y ampliación de esta vía destapada para facilitar la huida.
Lo degollaron
“Los terroristas no le dispararon sino que lo degollaron, para evitar producir el ruido de los disparos, porque ya intuían el plan, el operativo envolvente de nuestras Fuerzas Armadas”, reveló el presidente Álvaro Uribe।

“Los terroristas- agregó- incendiaron el vehículo en que presumiblemente llevaban al señor Gobernador; más adelante lo asesinaron, lo degollaron, miserablemente lo asesinaron”.
El ministro de Defensa, Gabriel Silva Lujan indicó que “la edad del mandatario no le permitió seguirle el paso al comando guerrillero y fue degollado para no ponerse en evidencia frente a las tropas militares y policiales que los seguían de cerca”.
La confirmación
La gobernadora encargada, Olga Vega Cedeño, les confirmó a los familiares del mandatario la infausta noticia।

“El Gobernador era un campesino, una persona trabajadora, que no merecía este final, el gobernador era un amigo para nosotros, nos enseñaba, guiaba y era como nuestro papá, estaba haciendo un buen mandato y la consigna es que el proyecto ‘Así construimos futuros’ continúe porque está lleno de proyectos favorables y beneficiosos para el Departamento”, manifestó la funcionaria।

La esposa del gobernador, Himelda Galindo de Cuéllar, víctima también de un secuestro, dio muestras de increíble valentía। Les pidió a sus hijos Luis Fernando, Norma Victoria y Paula Adriana, tranquilidad y resignación, convencida de que el hombre con el que vivió más de 45 años, está en el seno de Dios y regocijándose en la paz y tranquilidad que en la vida terrenal le arrebataron las Farc en cinco oportunidades.

Testigo
Paola Adriana quien presenció el plagio, estaba esperando a su padre, lista para empezar la celebración de su cumpleaños 69. “Venía llegando con mi escolta a la casa cuando escuchamos los disparos, mi escolta se identificó porque pensamos que eran miembros del Ejército y le dispararon pero no lo hirieron, entonces me dijo que me devolviera y presenciamos la huída de los subversivos quienes llevan a mi papá en el carro”, dijo.
El cuerpo permanecerá en cámara ardiente en la Asamblea del Caquetá, durante todo el día, según sus familiares। El será trasladado a Bogotá donde será cremado.

No resistió
El mandatario, secuestrado cinco veces, había nacido en Timaná, Huila el 22 de diciembre de 1940 Huila. Sin embargo desde los cuatro años se radicó en el Caquetá con sus padres. Morelia fue su segunda patria chica, donde fue alcalde y luego fue diputado a la Asamblea Departamental en 2001 y 2003.

El mandatario, avalado por el Movimiento Alianza Social Indígena, fue elegido Gobernador hace dos años hasta ayer cuando fue asesinado sin ninguna contemplación. Cuéllar quien había anunciado que no se dejaría secuestrar, no resistió su quinto plagio.
Estuvo casado con Himelda Galindo y era padre de Luis Fernando, Norma Victoria y Paola Andrea Cuéllar, quienes han padecido en carne propia, la degradación del conflicto armado.

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