Según algunas versiones, José Jaime Rojas había citado al colegio al estudiante con su padre y el muchacho decidió matarlo porque temía a un castigo de su progenitor.
El joven atacó a Rojas con un cuchillo y le propinó dos heridas mortales. Al ser llevado al hospital Vista Hermosa el rector llegó sin signos vitales.
"Ese manera un bacán. Yo estaba metido en el vicio y me puso bien", dijo Jaime Gómez (*), de 17 años, quien lloraba mientras caminaba en la marcha por la vida en Ciudad Bolívar.
Rectores, profesores y estudiantes de los colegios distritales de nueve localidades, así como habitantes de Ciudad Bolívar marcharon junto a él con claveles blancos puestos en las orejas, entre el saco y la camisa escolar, en las manos, y pancartas de homenaje.
Con miedo, pero pa'lanteLos rectores de 40 planteles distritales presentes en la marcha -que salió del colegio Naciones Unidas y terminó en Arborizadora Baja, a dos horas de camino- llevaban en el pecho una cinta blanca.Armando Ortiz, del República de Panamá, manifestó que su trabajo no es fácil. "Hay miedo. Uno nunca sabe qué situación se pueda presentar. Sin embargo, seguimos pensando igual que José Jaime: hay que retener a los muchachos conflictivos en el colegio, no mandarlos para la calle donde se ponen peor", dijo.
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