Riaño Moreno había pagado una condena de tres años y medio por extorsión en las cárceles de Picaleña, La Modelo y La Picota en Ibagué y Bogotá, respectivamente; sin embargo, después de salir de los reclusorios reincidió en sus conductas ilícitas.De acuerdo con las autoridades, el denominado "Rey de la Extorsión", seleccionaba sus víctimas al azar, mediante la consulta de avisos clasificados que aparecían publicados en diarios nacionales. En particular, aquellas personas que vendían fincas, casaquintas u otras propiedades en municipios aledaños a la capital de la República como La Mesa, Fusagasugá, La Vega, Silvania, Gachetá y Tibacuy, eran los principales blancos de sus acciones.
Modus operandiDefinida la víctima, José Reynel Riaño recurría a teléfonos celulares prepago para entablar comunicaciones con ellas, identificándose como el "Comandante Omega" o "Luis Murcia", integrante de las Autodefensas, tras intimidar a su interlocutor, el hombre procedía a efectuar elevadas exigencias de tipo económico.Conforme a lo informado por algunas de las unidades especializadas a cargo del caso, el "Comandante Omega", no sólo requería a sus víctimas por dinero, sino que para terminar de convencerlos de que en realidad se trataba de un miembro de grupos armados irregulares, les solicitaba la consecución de rollos de tela camuflada.Después de algunos contactos telefónicos, el supuesto extorsionista indicaba a los afectados cómo efectuar el depósito del dinero, para lo cual les proporcionaba los números de cuentas de ahorro, cinco en total, de diferentes establecimientos bancarios.Concretado el pago, Riaño Moreno expedía una boleta de paz y salvo, al igual que una clave de cuatro dígitos para su control personal.Es de anotar, que la apertura de las cuentas en mención no era función directa del "Rey de la Extorsión", para ello había sido comisionada una mujer, quien valiéndose de cédulas falsas efectuaba transacciones diversas.La encargada de las finanzas de la organización que, de acuerdo con el grupo Gaula, había recolectado mil 170 millones de pesos en más de 50 extorsiones a personas jurídicas y naturales, está siendo buscada por los organismos de seguridad del Estado.
Inteligencia criminal Las tareas investigativas adelantadas desde hace varios meses por la Policía, y que permitieron la aprehensión de Riaño Moreno, inicialmente tuvieron un traspiés, pues a la hora de efectuar los rastreos a las llamadas extorsivas aparecía como si estas provinieran del interior de la penitenciaría ‘La Picota', luego se detectó que en realidad estas tenían como origen una vivienda ubicada frente al establecimiento carcelario.Fue así como, personal antiextorsión s
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